Volver a Noticias 26 octubre 2023

La evolución en las soluciones para potenciar el capital humano

La líder de la plataforma que ayuda a las empresas a mejorar la salud mental y emocional de sus colaboradores, relata cómo ha cambiado la postura de las compañías desde la pandemia. Ya preparan su aterrizaje en Perú y miran Colombia como próximo destino tras adjudicarse una serie de fondos.

Una ajetreada agenda es la que por estos días maneja Valentina Ducasse, CEO del software de bienestar corporativo Dodo, que hasta hace unos meses era conocido como Kon3cta. Tras un cambio de nombre y branding —que se sentía un tanto ‘clínico’ y poco cercano—, la startup, que en la práctica ayuda a las empresas a mejorar la salud mental y emocional de sus colaboradores a través de atenciones de salud mental, medicina general, de urgencia, veterinario, coaching, asesoría legal, entre otros, termina por estos días los últimos detalles para su llegada a Perú. Se trata del primer país donde van a comenzar a operar fuera de Chile, luego de quedar en Startup Perú y asegurar un financiamiento de US$ 40 mil para concretar ese aterrizaje.

‘Creemos que hay un espacio de crecimiento importante para nosotros. La ejecución del programa son 12 meses y estamos constituyendo legalmente la empresa allá para poder comenzar a operar ya con el programa a partir de fines de este año’, adelanta Ducasse.

No es el único logro, ya que también revela que recibirán US$ 100 mil desde Rockstart, una aceleradora con sede en Colombia. ‘Ese monto es para un programa de aceleración, donde vamos a participar durante seis meses en un programa que es mitad virtual, mitad presencial en Bogotá, y ahí lo que vamos a estar haciendo es trabajar muy potentemente en nuestra estrategia de crecimiento en Latinoamérica’, explica.

Una estrategia que también mira hacia México. ‘El salto intermedio —y muy buen salto— es poder apalancarnos de estas dos inversiones y poder ir a aprender y ejecutar la estrategia que tenemos pensada en los dos países, y una vez con eso más fresco, con mejor experiencia, con ese aprendizaje incorporado, poder dar los pasos necesarios correctos mirando México’, afirma.

Ya llegan a más de 40 empresas y 30 mil colaboradores, con nombres como Copec, Abcdin, Tricot, Kunstmann, Concha y Toro, y Meds, entre otros. Además, recientemente sumaron su primera institución de educación superior, la Universidad de Santiago de Chile (Usach), donde llegan tanto a los estudiantes como a la planta administrativa. ‘Ha sido una experiencia súper enriquecedora, pero desafiante’, dice.

Salud mental pospandemia

La importancia de la salud mental se alzó como tema crítico con la pandemia y los años que le han seguido han puesto de manifiesto el impacto que tuvo en las personas. ‘Fue como abrir una caja y ahora ha quedado muy al descubierto que hay que hacerse cargo de todo eso y para nosotros lo más relevante ha sido poder desarrollar herramientas que le permitan a las empresas, como empleador y líderes, conectar con esas necesidades, con esos riesgos, con esos estados, que a veces son difíciles de abordar’, comenta.

Explica que, para la empresa, las crisis de salud mental representan un costo mensual, contínuo y recurrente, un costo que se manifiesta, por ejemplo, en ausentismo, licencias y en rotación. ‘Entonces empezamos a trabajar y desarrollar nuestro módulo de analítica para las empresas y el objetivo es darle la visibilidad necesaria sobre esas alertas que puedan estar ocurriendo dentro de los equipos o dentro de la organización y así la empresa se convierte en una mucho más conectada, mucho más consciente, más preventiva, que vela por el bienestar de cada una de las personas que trabaja allí’, detalla.

—Es un asunto del que las empresas se están haciendo cargo hoy y que ni siquiera era tema hace unos años… ¿Cómo se ha abierto ese espacio para que nazcan startups como la de ustedes, que atienden estos problemas?

‘Es impresionante el avance en Latinoamérica. Desde la pandemia, en verdad se ha visto una evolución importantísima en el mundo de recursos humanos, en las soluciones que hay en torno a cómo poder potenciar y mejorar todo lo que tenga que ver con el capital humano, que al final es el principal activo de la empresa. Para nosotros la pandemia, marcó un antes y un después en este mundo, justamente porque quedó al descubierto la desconexión que hay con tu capital humano, la desconexión que hay con el activo más importante de la organización. Fue demasiado brutal la apertura de ojos’.

Fuente: El Mercurio